PARA LIMPIAR BRONCES.--Se mezclan ocho partes de tiza con una parte de
flor de azufre, pulverizados lo más finamente posible. Con un trapo de
lana mojado en la mezcla se frotan los objetos de bronce y quedarán
brillantes como el oro.
PARA LIMPIAR EL MÁRMOL.--Se ponen en una taza tres o cuatro cucharadas de
agua, dos de sosa, una de piedra pómez pulverizada y una de tiza en
polvo.
Se hace con todo una pasta y se frota con ella el mármol. Después se pasa
una esponja con jabón, y el mármol queda como nuevo.
PARA LIMPIAR MANCHAS DE ACEITE DEL CUERO.--Se mojan las manchas con
espíritu de sal de amoníaco durante unos momentos, y en seguida se lavan
con abundante agua para impedir que aquella sustancia se coma el color
Page annotations:
Add a page annotation: